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En la historia de los medios de comunicación en Venezuela, casi medio siglo después de su muerte, Renny Ottolina sigue siendo el “Número Uno”. En cierta ocasión estaba grabando un comercial de TV. Se usaba un telón como fondo. Renny detuvo el trabajo. Se dio cuenta de que el telón no llegaba al piso. Dejaba una brecha de unos pocos centímetros. Cuando quisieron desestimar el hecho porque era un comercial de 20 segundos y quién se iba a dar cuenta, les explicó que por salir del paso en ese momento iban a dejar ese detalle grabado. Además, continuó, ese comercial se repetiría cientos o miles de veces y que esa imperfección o descuido sería vista por millones de personas en el futuro. Finalmente, hicieron los arreglos necesarios y el telón llegó al piso. El profesionalismo y la pasión logran cosas maravillosas.Veamos la fotografía que acompaña este texto ¿Les llama la atención algo en esta imagen?
Puede ser que compartan con nosotros la percepción de falta de espacio o que las comas sobran. Quizás resultado de una decisión presurosa, improvisada, para salir del paso. Quizá alguien pensó que manejar una app sea suficiente para trabajos profesionales y que “ese muchacho sabe mucho de computadoras”. Sin embargo, es bueno recordar en este momento al maestro Williams Deming, el personaje detrás de la calidad de los productos japoneses, cuando afirmó: “No hay sustituto para el conocimiento”.
Las nociones elementales de diseño, del manejo de los espacios, la ortografía y muchas cosas más en las que no somos expertos se conjugan para un resultado agradable a la vista, que comunique efectivamente las ideas y no que se conviertan en un martirio mientras estén exhibidas. Podemos pensar en la inversión que significó la elaboración de ese aviso. También el sentimiento de resignación, de “no hay más remedio” al ver que no era tan agradable a la vista como se había imaginado. Además de los efectos que surtirá sobre los clientes. Si ese es el aviso para promocionar el negocio, ¿Acaso será del mismo tenor los productos y servicios que ofrecen en venta en materia de dotación de muebles y decoración? Puede ser una duda legítima. Ya lo dicen: La primera impresión es la que cuenta. En este caso, esa es una de las primeras imágenes que tendrá el cliente antes de entrar, sino es que esto lo persuade para que no lo haga.
Sin embargo, esta situación representa solo uno de los tantos aspectos que deben ser atendidos en un negocio para que opere exitosamente. Vamos a cargar con las consecuencias de las decisiones que tomemos al comprar equipos e implementos, diseñar un proceso o una política de ventas, al contratar colaboradores o empleados o al seleccionar proveedores de insumos clave. Las prisas pueden sobrecargar la estructura de costos y generar problemas que a su vez generarán problemas en una suerte de ciclo perverso que se alimenta a sí mismo. Para colmo de males, muchas veces las soluciones, presurosas e irreflexivas, a su vez, generan más problemas. Así estaremos todos los días muy ocupados apagando incendios, atendiendo urgencias, decidiendo con prisa mientras descuidamos la esencia de la dirección o gerencia del negocio hacia el logro de las metas establecidas en los planes. Sean estos formales o solo una imagen del futuro en la mente del empresario. Un clásico “lo urgente sobre lo importante” de librito.
Por cierto, existe un cierto fervor hacia el arrojo impulsivo de la decisión rápida por encima de la valentía de la decisión que es analizada y evaluada resistiendo la presión por hacer algo de inmediato.
El uso sabio de los recursos ha estado ligado a la prudencia y a la reflexión antes de la acción. Esto no necesariamente toma horas, días o semanas. En todo caso dependerá de cada situación. Lo que está claro es que cuando hay que usar racionalmente los recursos, tener claras las preguntas antes de disparar respuestas siempre será más beneficioso, porque en el mercado las empresas tienen sustitutos, pero el conocimiento no.
Daniel Rojas Rivero
